Entrevista con Brian Chesky

Co-Founder and CEO of Airbnb

por Greylock2015-11-30

Brian Chesky

No todos los días se escucha una historia de startup que comienza en la escuela de arte, pasa por 30.000 dólares en deudas de tarjetas de crédito y presenta un momento crucial que involucra cereales para el desayuno con temática presidencial. Sin embargo, este es precisamente el viaje que Brian Chesky, CEO y cofundador de Airbnb, compartió durante su atractiva entrevista de "Blitzscaling" con Greylock. Su sincero relato ofrece lecciones invaluables sobre emprendimiento, diseño y la búsqueda incansable de una idea inicialmente considerada por muchos como "la peor idea que jamás funcionó".

La "Peor Idea Que Jamás Funcionó": El Génesis de un Diseñador

El camino de Brian Chesky para convertirse en un titán tecnológico fue cualquier cosa menos convencional. A diferencia de muchos fundadores de Silicon Valley, Chesky era un diseñador industrial de formación, graduado de la Rhode Island School of Design (RISD). Sus padres, ambos trabajadores sociales, simplemente esperaban que encontrara un trabajo con seguro médico, y como él recuerda con humor: "Ni siquiera sabía que eso existía. Ni siquiera sé si alguna vez escuché la palabra emprendedor". Este trasfondo artístico resultó crucial, ya que RISD le enseñó una verdad poderosa: "Eres un diseñador, puedes rediseñar todo a tu alrededor", en esencia, "puedes cambiar el mundo".

La génesis de Airbnb nació de la necesidad y de un destello de resolución creativa de problemas. En octubre de 2007, recién salido de su trabajo de diseño industrial y habiendo conducido hasta San Francisco con solo 1.000 dólares, Chesky y su cofundador Joe Gebbia se encontraron sin poder pagar su alquiler de 1.150 dólares. Una importante conferencia de diseño estaba en la ciudad y todos los hoteles estaban agotados. ¿La "solución creativa" que encontraron? Inflar tres colchones de aire, llamarlo "The Air Bed and Breakfast" y alojar a diseñadores. Estos tres primeros huéspedes —de Boston, Utah e India— forjaron conexiones inesperadamente que trascendieron una simple transacción. Como describe Chesky: "Esta amistad de un año se concentró en un par de días. Así que estas personas llegaron como extraños y literalmente se fueron como amigos". Esta profunda conexión humana desató la comprensión de que su "pequeña idea loca" tenía mucho más potencial que solo pagar el alquiler. Durante un breve período, incluso exploraron un "sitio web para encontrar compañeros de piso" hasta que descubrieron que ya existía, dándose cuenta, como dice Chesky: "La idea original era colchones de aire para conferencias... Por supuesto, resultó que la pequeña idea loca que pensamos que nadie más haría, se convirtió en la gran idea".

Conclusiones Clave:

  • Unos antecedentes poco convencionales pueden proporcionar una lente única para la resolución de problemas.
  • Resolver un problema personal (como pagar el alquiler) puede ser la chispa para una idea que cambie el mundo.
  • Las ideas "estúpidas" o descartadas a menudo tienen un potencial significativo porque otros las pasan por alto.
  • Las conexiones personales profundas con los primeros usuarios pueden revelar el verdadero valor de un producto naciente.

El Esfuerzo Incansable y el Emprendedor de Cereales

El camino desde una "pequeña idea loca" hasta un negocio floreciente estuvo pavimentado con un esfuerzo incansable y un rechazo repetido. Airbnb "lanzó" múltiples veces, iterando constantemente su producto, pasando de colchones de aire a camas reales, y finalmente construyendo un sistema de pago integrado. Los inversores tradicionales, sin embargo, no estaban convencidos. Chesky relata haber presentado su idea a 15 inversores ángeles por apenas 150.000 dólares, muchos de los cuales ni siquiera respondieron, otros consideraron que el mercado "no era lo suficientemente grande", o simplemente "no estaban entusiasmados con los viajes como categoría". ¿El punto más bajo? Una reunión embarazosa donde su sitio web en vivo falló, dejando a Chesky con nada más que una explicación incómoda. Recuerda que un mentor le dijo: "Brian, espero que esa no sea la única idea en la que estás trabajando".

Con decenas de miles de dólares en deudas de tarjetas de crédito y un cofundador contemplando irse, Chesky y Gebbia tocaron fondo. Desesperados, idearon un plan audaz: vender cereales para el desayuno. Diseñaron cajas personalizadas para "Obama Oh's, The Breakfast of Change" y "Capt'n McCain's, A Maverick in Every Bite", doblando a mano 1.000 cajas de cartón ellos mismos. Estos cereales de edición limitada, vendidos a 40 dólares la caja, recaudaron los famosos 30.000 dólares, lo suficiente para mantener la empresa a flote. Esta legendaria "hazaña del emprendedor de cereales" no solo generó los fondos tan necesarios, sino que también obtuvo una considerable atención de la prensa, demostrando, como Paul Graham de Y Combinator observó más tarde, que "Si puedes convencer a la gente de pagar 40 dólares por una caja de cereales de 4 dólares, quizás puedas lograr que extraños se queden en las casas de otros extraños".

Cambios Clave:

  • Evolucionaron el producto más allá de eventos de nicho y colchones de aire a una plataforma global de alojamiento compartido con pagos integrados.
  • Cambiaron de un acercamiento directo a la prensa a una estrategia de relaciones públicas "desde la base", comenzando con blogueros.
  • Adoptaron tácticas poco convencionales e incluso "absurdas" (como vender cereales) para generar expectación y financiación.

Aprendizajes Clave:

  • La persistencia es fundamental al enfrentar el escepticismo de los inversores y las dificultades financieras.
  • "Si lanzas y nadie se da cuenta, en realidad puedes seguir lanzando."
  • La desesperación puede ser un poderoso catalizador para la resolución creativa de problemas y la recaudación de fondos única.
  • "La diferencia entre estar desempleado y ser un emprendedor está en tu cabeza, usualmente es una mentalidad."

Escalando a Través del Amor Profundo: Y Combinator y "Cosas Que No Escalan"

Después de la aventura de los cereales, Airbnb se encontró de nuevo casi en la quiebra, pero la entrevista de Y Combinator con Paul Graham fue un punto de inflexión. Graham, inicialmente escéptico ("¿La gente realmente está haciendo esto? ¿Qué les pasa?"), se dejó convencer por el ingenio puro demostrado por los Obama O's. Llamó a los fundadores "cucarachas", un cumplido en el mundo de las startups, significando su capacidad de sobrevivir a cualquier cosa.

Y Combinator proporcionó estructura y, crucialmente, un cambio de filosofía. Graham impartió quizás el consejo más importante que Chesky recibió jamás: "Es mejor tener 100 personas que te amen, que un millón de clientes a los que simplemente les gustes". Esto liberó a los fundadores de la presión de la atracción masiva, permitiéndoles centrarse en una profunda satisfacción del cliente. Adoptaron literalmente una estrategia de "hacer cosas que no escalan": volando de Mountain View a Nueva York semanalmente, yendo puerta a puerta, viviendo con sus anfitriones, tomando fotos profesionales de los anuncios, escribiendo reseñas iniciales e incluso entregando cheques personalmente. Este compromiso intenso e íntimo les permitió entender los puntos débiles de los anfitriones y construir un producto que realmente resonaba. Chesky reconoció: "Es un problema intelectual totalmente diferente escalar algo que 100 personas aman que averiguar qué es eso". Para abril de 2009, eran "rentables para subsistir con ramen" (lo que significaba que podían mantenerse con fideos baratos) y tenían cientos de usuarios apasionados. Esta dedicación finalmente llevó a una inversión de 600.000 dólares de Sequoia Capital, legitimando su visión.

Prácticas Clave:

  • Cultivaron un enfoque y una dedicación intensos (trabajando de 8 AM a medianoche, 7 días a la semana) durante períodos críticos.
  • Priorizaron crear un producto que 100 personas amaran profundamente, en lugar de millones a quienes les gustara pasivamente.
  • Implementaron toques personales "no escalables" como visitas en persona, fotografía y soporte directo.
  • Se centraron en lograr la rentabilidad (incluso la "rentabilidad para ramen") como amortiguador contra la incertidumbre del mercado.

Más Allá de las Cinco Estrellas: La Filosofía del Diseño de Siete Estrellas y el Producto en el Mundo Real

Una vez que encontraron el encaje producto-mercado, el efecto de red de Airbnb comenzó a propagarse orgánicamente, con los huéspedes convirtiéndose en anfitriones y el boca a boca impulsando el crecimiento. Pero la filosofía de diseño de Chesky continuó superando los límites. Introdujo el concepto de "diseño de siete estrellas", desafiando a su equipo a pensar más allá del sistema típico de calificación de cinco estrellas. Argumentó que una experiencia de cinco estrellas es meramente lo que los clientes esperan; un producto verdaderamente amado debe hacer más.

Para ilustrarlo, Chesky describe con humor las posibilidades crecientes de una experiencia de check-in: cinco estrellas es un anfitrión que simplemente abre la puerta. ¿Seis estrellas? Recogida en el aeropuerto. ¿Siete estrellas? Una limusina equipada con tus aperitivos y revistas favoritas. ¿Ocho estrellas? Un desfile de elefantes en tu honor. ¿Nueve estrellas? Una recepción "Beatles en 1964" con fans que gritan. ¿Y diez estrellas? Elon Musk recogiéndote y llevándote al espacio. Aunque exagerado, este ejercicio obliga a los equipos a imaginar experiencias extraordinarias, permitiéndoles encontrar soluciones prácticas, ligeramente más allá de lo esperado.

Crucialmente, Chesky enfatiza que para Airbnb, el "producto" no es solo el sitio web o la aplicación. "El producto es lo que sea que el cliente esté comprando", explica, "Los clientes no están comprando nuestro sitio web, y no están comprando nuestra aplicación. Eso es solo un escaparate de comunicación. Lo que están comprando es una casa. Y francamente, lo que están comprando más que una casa es el anfitrión. La experiencia de la hospitalidad. Esta idea de pertenencia". Esta comprensión de Airbnb como un negocio "online-to-offline" necesitó la creación de storyboards para cada momento del viaje del huésped y del anfitrión, asegurando la responsabilidad tanto por los elementos digitales como por los del mundo real de la experiencia.

Conclusiones Clave:

  • Los efectos de red en los negocios de marketplace pueden propagarse orgánicamente cuando los huéspedes se convierten en anfitriones.
  • El enfoque de "diseño de siete estrellas" anima a los equipos a imaginar y ofrecer experiencias mucho más allá de las expectativas básicas del cliente.
  • Para los negocios online-to-offline, el "producto" es la experiencia tangible en el mundo real, no solo la interfaz digital.
  • "Cada momento es una oportunidad para hacer algo ligeramente más de lo que la gente espera."

Diseñando la Empresa: Cultura, Oficina y Experiencia Inmersiva

El ethos de diseño de Brian Chesky se extiende a cada faceta de Airbnb, incluyendo su estructura organizacional y espacios físicos de oficina. Inspirado en el mantra de Steve Jobs, "El diseño no es cómo se ve algo, es cómo funciona", Chesky cree que "todo necesita reflexión y diseño", desde el sitio web hasta la empresa entera. Esto lo llevó a reinventar elementos corporativos comunes, empezando por la oficina.

Reconociendo que los empleados pasan más tiempo en el trabajo que en casa, Chesky buscó crear un ambiente inspirador y cómodo que reforzara la misión de Airbnb. Transformó sus salas de reuniones en recreaciones fieles de anuncios reales de Airbnb de todo el mundo. Como señala, "Es tan crítico que no haya disonancia entre lo que está dentro del edificio y lo que está fuera del edificio". Este enfoque inmersivo no solo proporciona una ventaja competitiva única para la contratación, sino que también asegura que los empleados estén constantemente inmersos en el producto mismo que están construyendo. Esta conexión tangible con la misión fomenta un sentido más profundo de propósito y pertenencia, recordando a todos que están, en sus palabras, "trabajando en el centro del universo" de su negocio. Esta aplicación holística del pensamiento de diseño subraya la creencia de Chesky de que cada detalle, por pequeño que sea, puede ser una oportunidad para la reinvención creativa y un diferenciador competitivo.

Prácticas Clave:

  • Aplicó el pensamiento de diseño más allá del producto a la estructura organizacional, la cultura y el espacio físico de la oficina.
  • Transformó el entorno de la oficina en una experiencia inmersiva y de marca que refleja el producto.
  • Eliminó la "disonancia" entre el ambiente de trabajo interno de la empresa y su producto externo.
  • Utilizó el diseño de oficina inmersivo como una poderosa herramienta para la atracción de talento y el refuerzo cultural.

"Es mejor tener 100 personas que te amen, que un millón de clientes a los que simplemente les gustes." - Brian Chesky